No he jodido mucho con el pasado, pero he jodido suficiente con el futuro. Sobre la piel de seda hay cicatrices que vienen de las astillas de las estaciones y las murallas que he acariciado. Un escenario es como una astilla de madera, como un tronco de Helen, es mi placer. Mediré el éxito de una noche por cierto por cierto por el monto de meado y hierba que pueda exudar sobre las columnas que abrigan al P.A. Algunas noches sorprenderé a todos al saltar con una falda de malla verde cosida por arriba con delgados círculos metálicos que deslumbren y encandilen. Las luces eran violetas y blancas. Yo tenía un velo ornamental, pero no pude soportar usarlo. Cuando mi pelo fue cosechado yo busqué resguardo, pero ahora mi propio pelo es un velo, y el cuero cabelludo interno es un cuero cabelludo de locura y un comanche durmiente descansa bajo este alambrado de la piel. Despierto. Estoy descansando pacíficamente. Estoy descansando pacíficamente y mis rodillas están abiertas al sol. Lo deseo y él está absolutamente preparado para poseerme. En el corazón soy un musulmán, en el corazón soy un americano. En el corazón soy un musulmán. En el corazón soy un artista americano y no tengo culpa. Busco placer. Busco los nervios bajo tu piel, el pasadizo angosto, las capas, el pergamino de lechuga antigua. Adoramos las fallas, el vientre, el vientre, el lunar del vientre de una prostituta exquisita. La sangre con letra entró. No le he vendido mi alma a Dios.
Patti Smith. (Marzo, 1978)